Poema 1
Sutil, diáfano, tibio, mi pensamiento
vuela hacia ti,
y se sumerge suavemente entre tus
pechos
para beber de ellos, la esencia madre
y eterna de la vida.
Como una lanza punzante,
que se clava en la carne trémula,
así desgarraste con su moharra
el bastión sólido de mis pensamientos,
navegas en el flujo constante de mi
sangre
y son todos mis sentidos los que
sucumben,
al dulce suave y profundo estallido de
tu voz.
Te recuerdo adormecida entre mis
brazos,
Con esa necesidad casi ancestral de
ser amada
y en la penumbra gris del pequeño
cuarto,
alumbrabas con mil estrellas,
la presencia cálida y sabrosa
del fruto que tú me dabas.
Cecchi
Quilmes 23/11/07
Gracias Musas por acariciarme hoy.
Stop!
Aun no es hora de apagar la luz,
todavía queda mecha en esas velas que se funden.
La noche me llega a través del sonido del silencio.
La paz sepulcral de los vivos, en sus camas dormidos.
Soy lo que en las películas denominan zombis.
Mitad vivo, mitad muerto.
Entre la noche y la luz del día.
Mitad vampiro, mitad vacío.
Solo mi corazón sigue su latido,
su constante resonar en este cuerpo sin sol.
Mi mente controla el descontrol de mis impulsos,
genera dolor en forma de aviso.
No logro dilucidar lo que pretende de mi,
ni sé que es lo que alguien quiere de mi.
No se si quiero saber, pero tampoco quiero olvidar, ni dejar de sentir.
Parar la razón es tan difícil amor
¿A dónde voy tan rápido?
¿Por qué se frena el tiempo y parece nunca terminar?
Leandro Szilvay
todavía queda mecha en esas velas que se funden.
La noche me llega a través del sonido del silencio.
La paz sepulcral de los vivos, en sus camas dormidos.
Soy lo que en las películas denominan zombis.
Mitad vivo, mitad muerto.
Entre la noche y la luz del día.
Mitad vampiro, mitad vacío.
Solo mi corazón sigue su latido,
su constante resonar en este cuerpo sin sol.
Mi mente controla el descontrol de mis impulsos,
genera dolor en forma de aviso.
No logro dilucidar lo que pretende de mi,
ni sé que es lo que alguien quiere de mi.
No se si quiero saber, pero tampoco quiero olvidar, ni dejar de sentir.
Parar la razón es tan difícil amor
¿A dónde voy tan rápido?
¿Por qué se frena el tiempo y parece nunca terminar?
Leandro Szilvay
Suelo extrañar a menudo
las caricias que inhiben mi seguridad.
Recordar que los momentos
solo momentos son,
estremecen mis ganas
y encogen los hombros de mi excesiva
inquietud.
Derrámense las lágrimas contenidas,
las culpables de oxígeno escaso en tu piel.
La tormenta en tus ojos te pide cesar,
el temblor en tus manos no acaba jamás.
Tu cara empalidece el alrededor ahora gris
pero tus oídos bailan con melodías cálidas al
tacto del azar.
El río de tus dudas
son el interrogatorio cotidiano en el periódico
del presente.
Es que su corriente es tempestad,
y sus orillas peligrosas
el principio de un final.
María Luján
abstractaspalabras.blogspot.com
ella sí me conoce
[...] entiende de mí
cada respiración
cada no quiero
José Catillo
no es real
pero sí está cuando me acerco
sabe como usar el silencio en respuesta
es la única que me ignora al mirarme
que me canta antes de dormir
la que en sueños
se queda quieta
a veces
es la única a la que no le duelen mis caricias
Agostina Ciccone
El laberinto
Salí como tantas otras veces a la calle a
buscar una chica. Caminé durante horas y no encontré a ninguna; obviamente hay
mujeres por la calle, pero es muy difícil encontrar a una que esté sola, tenga
más o menos la misma edad de uno, y una vez habiéndola encontrado, que con uno
quiera hablar. Ya me había rendido y volvía a mi casa.
Enfrente de mí había un boliche que parecía tener una salida del lado
opuesto a la entrada, por lo que decidí cruzarlo para acortar camino; el lugar
era una especie de casa convertida en bar. Entré en la primer habitación y
después a la segunda, cuando vi la salida, salí, pero en vez de aparecer fuera
del negocio, aparecí de nuevo en la primer habitación; No creí estar viviendo
una experiencia fantástica ni nada de eso, supuse que era una especie de
laberinto como los de los parques de diversiones, ya que vi varias cosas raras,
pero no tuve miedo, ya que como dije, creí que era solamente eso. Había un tipo
de pelo largo al que le pregunté como salir, me dijo por donde se salía y me
fui. Pasé otra vez por la misma habitación y volví otra vez a entrar a la
primera. Lo vi al tipo de nuevo y le dije:
-Che,
decime como salir porque sino me quedo acá con vos para siempre, ¿querés que me
quede acá?
El
tipo dijo que no y se reía, pero no me decía por donde salir. Había una mujer y
le dije lo mismo.
-Te
voy a decir lo mismo que le dije a él: decime como salir porque sino me quedo
acá con vos para siempre, ¿querés que me quede acá?
La
mujer me dijo:
-Seguime.
La
seguí y entramos a la segunda habitación, la mujer empezó a buscar la salida y
no la encontraba, entonces pensé que estaba en la misma que yo. Hablamos un
rato y después ella se acercó a una puerta y la abrió. La puerta la atrajo y no
la dejó ir. Habían del otro lado almas que me pedían que las ayudara, una
imagen propia de película de terror; Ni siquiera intenté acercarme a la puerta.
No sé si todavía creyera que solamente era un lugar diseñado para asustar o que
se trataba de otra cosa, lo que sí sabía era que quería irme. Vi una salida y
salí esperando entrar de nuevo en la primer habitación, pero aparecí afuera.
Una vez ahí, me vi sosteniendo una especie de globo del cual podía escuchar una
suave voz de mujer; entendí que era de la misma con la que había estado. Le
pregunté:
-¿Te
voy a ver otra vez?
-Tal
vez.
-¿Voy
a vivir mucho tiempo?
-No.
tenés una misión importante en la vida, vas a hacer muchas cosas antes de
morir, pero no te va a hacer falta mucho tiempo para hacerlas.
-Voy
a escribir un cuento sobre esto, ¿está bien?
-Sí,
escribilo.
-¿Qué tengo que hacer para cambiar mi vida?
-Nada, todo se va a arreglar solo.
Después de eso y con una calma impropia de la situación vivida, me fui a
mi casa.
Martín x
Poeta delibery
A Oscar Macho
Para un poeta entrañable
con mucho cariño
No hace falta que lo llames
... aparece:
en cualquier parte;
desde el sur de Buenos Aires.
Se dirige a la ciudad,
recorriendo cada oído,
recitando apasionado
sus poemas colorido,.
a su paso.
Pintoresco personaje ciudadano,
sentimientos ambulantes
declamado.
Amor, nostalgia,
encuentro, infancia.
"Sueño azul" como lo llaman,
pronuncia un verso
entusiasmado
y vuela lejos.
Es ave libre.
Auto instruido se define,
piensa, escribe, camina y proclama,
sonrisa amistosa
mirada tranquila,
calidez y simpatía,
Cabello cano, ojos claros,
ademanes fervorosos...
Es Oscar Machos,
te encontrará!!!
Cintya
Noche sabia
Si tu alma está dolida
no llores esta noche,
déjala pasar y espera la mañana,
seguro todo estará mejor.
Sientes pena, ganas de romper las cosas;
haz lo que sea, grita si quieres,
pero no llores esta noche.
Piensa en mí o en ti
créete que esto también pasará
y cuando eso pase, solo un
recuerdo será.
Alma perdida, corazón desvariado
no le consultes al día
consúltaselo a la noche
ella y tu almohada comprenderán
tu pesar, te dará un sabio consejo
y por la mañana todo terminará.
Por eso no llores esta noche
déjala pasar.
Héctor