Revista Viajero Nro. 38 - Octubre 2009





El agua golpea los vidrios,
afuera llueven buenos augurios
pero ella no puede mojarse,
la encierra su cajita de miedo.
Espesas noches implorando misericordia,
ardiendo las penas.
Caminan los relojes.
Ruega escapar de su cajita,
y las llaves juegan a hacer música entre sus manos.


Noelia S. Bozzo
noeliabozzo@hotmail.com














Instrucciones para no sentirse triste


A mi amiga Natalia

Si usted esta angustiado, una tristeza le oprime el pecho, le rondan por la cabeza pensamientos nada agradables, manteniéndolo despierto toda la noche, no descansa bien, tiene siempre una lagrima a punto de caer, si le duele el pecho como si tuviera una piedra, sin motivo aparente. Así como de la nada un día se ha levantado triste, siente que la vida no le sonríe de la misma forma que otros días, siente una pesada nube, usted esta simplemente triste o deprimido.
Esta es una guía práctica para que el sol vuelva a brillar para usted y que pueda sentirse más liviano en la vida.
Antes que nada, debe levantarse de la cama, si, porque a pesar de no dormir, muchas veces suele ocurrir que no quiera levantarse de la misma pues no encuentra motivos, la razón es que no hay motivos, pero eso no debe importarle, debe levantarse.
Importante, dese una ducha, siempre es buena reparadora junto a un desayuno rico en proteínas, ¡mímese! Usted sabe como, no importa si no tiene ganas…
Si tiene una mascota, un perro, un gato, un hámster tal vez, o quizás una tortuga, búsquelo, aliméntelo, también puede pasar que en nuestro estado de tristeza absoluta nos hayamos olvidado de alimentar a nuestra mascota. Una vez que su mascota este feliz por el alimento recibido, abrácelo, fuerte, pero no tanto como para asfixiarlo, déle cariño, usted puede, inténtelo, pásele la mano por el lomo, levántelo a upa – Esto no se recomienda si tiene por mascota a un pez, por ejemplo, no lo saque de la pecera, repito no lo saque de la pecera, podría ser motivo para que aumente su tristeza al verlo boquear sin aire.- Inmediatamente verá y tendrá entre sus brazos a un ser vivo que daría lo que fuera por usted, le devolverá en creces el afecto que le acaba de prodigar, y se sentirá una persona que no está sola en el mundo, tiene un ser vivo que le da amor, ¿verdad que ahora se siente más reconfortado?.
Si no tiene mascotas, pero tiene una planta, repita el paso uno, el dos no es necesario, déle agua, si le ve las hojas marchitas ajadas, sáqueselas, límpiele las hojas lindas con un pañito húmedo, también demuéstrele afecto, no es necesario que lo levante, tal vez usted tenga un ciruelo y eso le puede producir dolor de cintura, póngale música suave, siempre se recomienda música clásica, parece que a las plantas les gusta Beethoven, pero le damos la libertad de que la música la elija usted, sienta renacer la vida y esa planta le devolverá el cariño poniéndose linda y única, sólo para usted.
Si usted hizo todo esto inmediatamente luego de la ducha, el siguiente paso es vestirse, póngase ropa cómoda pero linda, no se disfrace de indigente, tampoco de gala, simplemente póngase algo que a usted le guste. Ok si quiere ponerse un smoking esta en todo su derecho, ¿quién soy yo al fin y al cabo?. Un vez vestido, salga a la calle, aunque le dé pereza y desazón, salga a la calle y camine, camine sin rumbo aparente. Pero busque una plaza, así como quien no quiere la cosa, búsquela, camine hasta la plaza que recuerde, recórrela, amíguese con ese espacio verde que hacía tiempo no veía, si gusta usted puede ver los niños jugar en el arenero, sino simplemente busque un banco y siéntese. Si su mascota era un perro, éste puede acompañarlo en su paseo, es más; es recomendable que lo acompañe su perro, si usted tiene un pez, no es recomendable que lo saque a pasear.
A continuación lo que hará es muy sencillo, una vez sentado, tratará de escuchar los pájaros trinar, si no hubiera pájaros en esa plaza trate de trasladarse a otra, busque, escuche a los pájaros cantar, si es una de esas plazas céntricas, y hubiera palomas recuerde llevar migas de pan, aliméntelas pero con cuidado no queremos que desaparezca debajo de una montaña de animales alados desesperados por comer, ya comidas las palomas y ya escuchados los pájaros, levante la cabeza y mire hacia el cielo, sentirá de a poco un calorcito en la piel, es el sol que lo abraza, siéntalo, y escuché los pájaros, recuerde a su gato, perro, tortuga o pez dorado en su casa, esperándolo, recuerde que el cariño que le tienen reservado, sienta un poco más el calorcito del sol en su cara, y de pronto ya no se sentirá ni tan solo ni tan triste como antes…


Lola Ghiglione














Fue un rapto de recuerdos


Anoche, muy anoche, es decir muy tarde en la noche, mi prima, mi amiga, mi hermana, tenía unas palabras que quería escribirlas, soltarlas, y como no se animaba me las dió, para que yo escribiera. anoche, muy anoche mi alma, no tenía palabras, no podía gritarlas y como no se animaba a quedarse en silencio, tomó las palabras de su hermana y las transformó en poesía. Las dos sabíamos que su alma y la mía sentían lo mismo, por eso es que mis letras pudieron darle forma a sus palabras.


Fue un rapto de recuerdos o tal vez
mi cuerpo bajando la guardia: deponiendo armas;
lo que me llevó a escribirte la otra noche; todas las noches.
Fue un rapto de recuerdos o tal vez  levé anclas,
fue la traición cansada lo que me llevó a llorarte
la otra noche; todas las noches.
Durante esos raptos en los que mi mente
y mi corazón, cansados, me traicionan.
Traicionan la memoria de mi cuerpo, que intenta olvidarte.
Olvidar, el roce de tus labios, la miel de tus manos.
Quizás, tal vez, yo sea el rapto en el cual mi mente me traiciona
y mi cuerpo te recuerda.
Mi cuerpo bajando la guardia: deponiendo armas
Cuando menos lo espero, cuando más te anhelo.
Sí, es eso, un rapto de recuerdos que se esfuman con el tiempo
que se desangran en minutos; 
en todos los minutos, lejos de mi cuerpo.
Y por más que lo intente, 
la memoria traicionera de mi mente.
te evaporas. Te desplomas.
ante la luz de mis ojos, ante la rabia y la furia de mis manos
ante la frialdad de tu mirada. Entre todas tus cagadas.
Te desplomas. Te evaporas.
y ya no te conviertes
en un rapto de recuerdos.
Ya no me traiciona la memoria.
Es por eso que te rapto de mi cuerpo
que te evaporas entre mis recuerdos
que te desplomas ante tu incoherencia
que ya no te permite. Que ya no te permito
que seas un rapto entre mi cuerpo.

María Eugenia Nebbia
maru_nebbia@hotmail.com














Cuestión de distancia


Supongamos que María tiene muchas ideas apiladas como libros sobre una pelota de golf. Ideas que, en un intento desesperado por alcanzar la estabilidad, son apoyadas en bloque sobre la cabeza de Juan. Se agrega también un vaso descartable casi sin agua, un gato de felpa azul y catorce gramos de cal.
Después de la arriesgada operación María descubre con cierta tristeza que todo está aún más próximo al derrumbe, y en vez de retirar una a una todas esas cosas que se apilan desprolijas sobre la cabeza de Juan, lo sacude de la camisa esperando que se acomoden.
 
Todo cae abruptamente y golpea contra el suelo, estallando en miles de pedazos bien chiquitos —el todo incluye también varias ideas de Juan. María ve el desastre que ha hecho y decide remendarlo pero, al intentar agacharse a recoger lo que tiró, descubre que sus brazos y cabeza están a dos pares de millas de sus pies.















Reflexiones II


Siento que transito sobre una cornisa
que separa lánguidamente el dolor de la algarabía,
las heridas punzantes de aquellas suaves caricias,
el pasado de un amor de fantasía,
y la soledad que se aproxima.

Aún mis pensamientos están embotellados
en la autopista de los aciertos,
mientras mi corazón incita a los impulsos
a arrojarse hacia la calle del futuro

Y yo continúo sobre este filo de cemento
esperando una respuesta, una excusa
para evitar este momento y seguir sobreviviendo
en la ordinaria batalla de la vida

Se confunden mis emociones
al no encontrar un equilibrio
a mis miedos y pasiones
que juegan plácidamente
en el parque de mi pesimismo

Sé que este lugar es pasajero
que ya llegaran mejores tiempos.
Tiempos de cambio, de cordura
si es que no se disiparon
en el laberinto de la locura

Emilia Vega Hünicken














Marakame


               San Andrés Cohamiata, lugar terregoso mezclado con  pasto largo y grandes rocas…  lugar Bendito, enclavado en la sierra madre occidental, es  la sierra Wixarrika. La tez de la piel es  del color de la tierra… morena

Pantalones de tela de manta color blanca, las camisas de color brillante y descubiertas a los lados del abdomen, el sombrero con adornos de tela o con plumas de cientos de  aves,  los huaraches son de unos hilos muy delgados de correas, ¡así se viste el hombre!

La mujer viste de manera sin igual con un conjunto llamativo en colores y figuras, con pulseras y collares  hermosísimos, fabricados con sus propias manos y con la colorida shakira, así  visten las mujeres.

Las grandes formaciones  rocosas dan la impresión de que tienen vida, cuando cae la noche la constelación dice presente ¡aquí estoy!

Las festividades de octubre son sagradas presencie actos que jamás  había visto en mi corta vida, en ese mes se elegirá al nuevo marakame que interpretara los designios de los dioses,.

Es Rogelio, moreno Jovial y  sobre todo muy humilde en su actuar es él, el nuevo marakame de las tierras del venado azul de las tierras del viento que habla, de las tierras de Uca Villeli, Rogelio habla de manera excelsa. Charle con el ala luz de la luna, no había luz eléctrica por lo que el cielo  estrellado mostraba su arrogancia celeste.
En la gran plaza de tierra firme me senté cerca del lugar sagrado, conversaba con mi amigo Wirra, intercambiábamos impresiones yo le hable de Terrorismo, robo de niños, trasplantes de órganos y el tren ligero.
El me hablo sobre Aramara, sobre el gran astro rey sobre dios y la muerte.

Yo le regale una playera de Zapata y una lámpara de mano, el me regalo un sagrado peyote y me dio su bendición bajo el templo de las 2 campanas, así  fue una travesía imborrable que jamás olvidare.

*Crónica de la sierra huichol en Jalisco México

Pepe Cabrera Martinez
Guadalajara Jalisco, Mexico














De colores


Debajo  de  la  luna
descansan  mis  pies  fatigados,
y  busco  en  mis  ojos
aquel  leve  suspiro  que  la  alegría  grita
cuando  los  recuerdos  resientes
te  impregnan  de  felicidad  la  vida  cotidiana.
He  atravesado  oscuridades  llovidas
de  múltiples  desilusiones  con  dientes  y  corajes.
Después  de  algunas  tempestades,  mi  pobre  barca
está  adornada  de  alegrías,  de  colores,
de  desafíos,  que  a veces  me  empecino  
en  disfrazarlos  de  miedos…
¡Cuan  débil  es  la  fortaleza  de  los  sensibles!
¡Pero  cuan  firmes  son  los  pasos  del  optimista!
















Musa desconocida


Día tímido casi imitando la nada;
prevalecen los susurros sin caricias.
Los arroces con sus cosas se distraen
y fluyen cual vertiente al horizonte.

Las marcas del espejo están disconformes,
los ángulos de tu piel están al borde de aparecer;
miradas de un jilguero desconcertado.
Termina el cielo y empieza.

La música que hace silencio

La hiedra que no crece